miércoles, 27 de marzo de 2019

Diversidad familiar

Aquí, por fín nuestros cuentos:

PRIMER CUENTO

Esta es la historia, requetehistoria de la familia Bibí-mimí. Una familia de monstruos y brujas. El rey monstruo Mimí y la reina bruja Momó tenían cuatro hijos, tres eran brujas y uno era monstruo.
Todos juntos se montaron en su coche rojo, veloz como el rayo. Rayo McQueem
Al llegar a su destino se encontraron en la puerta a un dragón grande y fuerte con colmillos llenos de sangre y una gran lengua, superlarga de fuego
La familia se asustó y de repente apareció en medio del camino un paraguas mágico de colores sujeto a un duendecillo con las orejas gordas, largas y puntiagudas que recogió a la familia y se lo llevó volando a su casa que estaba lejos, muy lejos.
Pero en mitad del camino, se cayeron en un tronco grande que estaba en el agua del río. En ese momento apareció un gran tiburón que quería comérselos en cuanto los vio.

Afortunadamente pudieron meterse todos juntos, en la fuente, atravesarla y llegar sanos y salvos a su casa.

SEGUNDO CUENTO

Había una vez una reina que le gustaba pasearse por la playa con su hijo el príncipe de la capa roja.
Una mañana el príncipe quería meterse en el agua pero estaba muy caliente, quemaba, porque el monstruo rosa de dientes largos y ojos saltones, calentaba su desayuno en medio del mar. Movía sus grandes alas al ritmo de su canción preferida.
Las arañas voladoras y picantes eran su comida favorita.
Cuando el monstruo rosa se dispuso a desayunar apareció por allí la familia de los fantasmas Colas de la cola blanca. Las dos niñas fantasmas cogieron a las arañas con la ayuda de su gatito. La mamá fantasma paseaba al gatito con la cuerda y el abuelo fantasma sentado en su sillón viéndolo todo.
Cuando recogieron todas las arañas, se las llevaron a la policía que estaba esperándolos en la playa. Las metieron en la cueva donde las amarraron para que no picaran a nadie más.

 El monstruo rosa se quedó triste y sin desayunar en medio del mar, con sus brazos cruzados y su cara arrugada. Pero pronto se fue al fondo del mar para comer su pescado favorito.

TERCER CUENTO
En el castillo de banderas rosas y azules vivía la princesa Cacatúa y su novio Abril, junto a la reina Mimí.

Cada mañana salían a pasear a caballo por el bosque mágico de las hadas, cuando el reloj marcaba las 9 y se abrían las puertas del castillo junto a la gran fuente de galletas de chocolate.

Cuando llegaron al bosque les recibió el Hada Madrina con la varita mágica azul y el libro fantástico de color purpurina.

Los novios se tiraron por el tobogan del arcoiris para llegar al fondo del río para bucear.

Les gustaba romper las piedras con el gran taladro rojo de chocolate y dar volteretas muy chulis en la orilla del río.

Cuando se cansaban de jugar volvían al castillo dando grandes saltos en los charcos de barro.
La reina Mimí, mientras, les esperaba para contarles un cuento.

 Y colorín colorado este cuento se ha acabado

CUARTO CUENTO

Erase una vez, un reino gobernado por dos fantásticas, guapas, preciosas y buenas reinas que vivían en el palacio del bosque, con su niña, guapísima y preciosa con una coletita y una corona en la cabeza.
Una hermosa mañana , prepararon sus grandes motos. Se colocaron el casco y comenzaron su aventura hasta el Castillo de El Morche, donde vivían sus amigos. Querían pasar unos días de playa.

En medio del camino apareció un león grande, gordo, con afilados dientes, con ojos maliciosos, con ojos de hambre.
Las dos reinas y su hija se quedaron paradas. Tenían miedo….
El bosque estaba oscuro, muy oscuro….
La reina Manifú paró su moto, se bajó de ella y de su mochila sacó el libro mágico de los hechizos. Pronunció las palabras mágicas :
abra cadabra
pata de cabra
ojos de rana
tenemos que confiar
en el ogro
de la manzana”

puuuuffff
y al momento apareció el ogro verde, feo, enorme con una manzana en la mano.

Al león, se gustaba comer fruta sana, así que el ogro le dio su manzana verde, envenenada y apestosa. Y tranquilamente se quedó sentado, comiéndola, dejando pasar a las tres moteras.

Al llegar la oscura noche, vieron el castillo de sus amigos que les recibieron con zumos de piña y batidos de fresa.

Y colorín colorado este cuento se ha acabado!!!!!!!

3 comentarios:

  1. No me imagino cómo habrá sido elaborar estos cuentos con los niños. ¡Me encanta la idea al completo y la forma de llevarlo a cabo! Bravo, Isabel. Que suerte tienen nuestros niños de tenerte.

    ResponderEliminar
  2. Ahora nos toca!! Manos a la obra a ilustrar y adaptar😉

    ResponderEliminar